Con la condena y proscripción política a la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, asistimos a la redacción de una página más de la historia negra del Partido Judicial de la República Argentina, y sus socios de los grupos concentrados.
Hoy ha quedado nuevamente de manifiesto la existencia de un Estado paralelo y de una mafia decidida a romper por completo el sistema democrático argentino. La condena política del Tribunal, como siempre supimos y dijimos, ya estaba escrita.
Lejos de ser el resultado de un análisis imparcial por parte de los magistrados de la Constitución sobre un caso concreto, este atropello constituye la expresión manifiesta de un acuerdo entre poderes concentrados integrados por medios de comunicación, grupos económicos, un sector del Poder Judicial y otro de la política argentina. Las recientes filtraciones de las comunicaciones entre sectores del macrismo, del Grupo Clarín y de jueces federales evidencian esta afirmación.
Al proscribir a la vicepresidenta, quien además es la máxima dirigenta de nuestro país, los grupos concentrados de siempre están queriendo hacer lo mismo que lograron en Brasil y en otros países de la región, que no es ni más ni menos que un Golpe de Estado por otros medios.
Simultáneamente, el mismo día y a la misma hora de la sentencia, se iniciaba en el Honorable Concejo Deliberante de Lanús la 9na. Sesión Extraordinaria, en la que se iba a discutir el Presupuesto 2023. Ante la superposición de estos dos hechos solicitamos la postergación de su tratamiento, pero el pedido fue negado. Luego, en el desarrollo de la Sesión, solicitamos un cuarto intermedio, que también fue rechazado. Lo preocupante es que el presupuesto destinado a los vecinos y vecinas de nuestra ciudad fue discutido a sus espaldas, y también a espaldas de la oposición.
Desde el Frente de Todos de Lanús reiteramos nuestra solidaridad con la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, y convocamos a la ciudadanía a manifestarse pacíficamente en defensa de la democracia. Como dijo un diputado nacional macrista: “Sin Cristina hay peronismo y sin peronismo hay Argentina”. Los grupos concentrados están completamente decididos en ir por un país, una provincia y una ciudad de Lanús sin Cristina, sin peronismo y, por lo tanto, sin democracia.