
En su tradicional sede de la calle Azopardo, el único que dijo presente fue Héctor Daer que tuvo a su lado a la ex presidenta brasileña. En su discurso, el triunviro apuntó contra la reforma laboral «vamos camino a un endeudamiento». En el gobierno nacional no cayó nada bien la presencia de Rousseff en el acto de la central sindical.
«En estos días nos desayunamos con un proyecto que quiere volver a bajar las indemnizaciones y otro que quiere hacer desaparecer las indemnizaciones, como si eso fuera el problema de la inversión en la Argentina». Esa crítica hacia Cambiemos partió del propio Daer, quien encabezó el austero acto de la CGT por el Día del Trabajador.
En compañía de Noemí Ruiz (modelos), Rodolfo Daer (alimentación), Victor Santa María (porteros), y Eduardo Duhalde, el triunviro dijo que es un «Primero de Mayo díficil», porque «a los trabajadores nos quieren hacer responsables de todos los males de los que gobiernan mal, para los sectores más poderosos y la economía más concentrada. Utilizando las recetas liberales por excelenecia, al país le va cada vez peor».
Sin embargo, el protagonismo de la jornada venía de la derecha de Daer. A su lado se sentó la ex presidenta de Brasil, Dilma Rousseff. «Cuando le damos la bienvenida le decimos que no sólo somos solidarios sino que venimos a comprometernos en acompañar el proceso para que el compañero Lula sea liberado y para que no sea proscripto de las elecciones que seguramente va a ganar en Brasil», apuntó el titular de Sanidad.
«No nos cabe duda de que el proceso inventado contra Lula es injusto e ilegal. Con el único objetivo de que los sectores populares no vuelvan a ser gobierno», agregó.
Por su parte, la ex mandataria de Brasil, agradecida por la invitación ya que «me siento como en casa», detalló, dijo: «Nosotros, del Partido del los Trabajadores, tenemos una relación muy importantes con las organizaciones de los trabajadores. En Brasil el PT es un proceso de conciencia del cual Lula fue el arquitecto».
«Tiraron sobre Lula da Silva una serie de noticias falsas sin derecho de defensa», dijo la brasileña desde Azopardo. Con su claro portugués, manifestó que » Brasil sufrió un golpe porque derrotamos la agenda neoliberal. Ellos no quedaron conformes con lo que propusimos, que era la mejoría de las condiciones de trabajo. Tuvimos un aumento muy fuerte del salario, pero para ellos el gasto es un absurdo», señaló a modo de ejemplo.
Rousseff apuntó contra la oposición brasileña y argumentó que subestimaron la crisis económica que afronta Brasil.
A diferencia de años anteriores, ayer el Ejecutivo no participó en los actos por el Día del Trabajador. El presidente Mauricio Macri visitó el cuartel de Bomberos de Vicente López donde compartió “una linda charla sobre uno de los trabajos más comprometidos de la comunidad”.
Lo cierto es que la semana pasada el Ejecutivo envío el texto del proyecto de reforma laboral al Senado donde, entre otras propuestas, pretende modificar del cálculo indemnizatorio, «el sueldo anual complementario, los premios y/o bonificaciones, y toda compensación y/o reconocimiento de gastos que el empleador efectúe hacia el trabajador”. Este aspecto despertó la furia de los referentes sindicales.
Por el lado de la CGT, La falta de definición de una conducción en el movimiento obrero conspira con nuevos acercamientos. Fuentes sindicales manifestaron que mañana podría haber fecha para la elección del nuevo secretario general o bien “ante la falta de acuerdo continuar unas semanas más el triunvirato”.