Los salarios docentes vienen perdiendo ampliamente frente a la evolución de la inflación. Así concluyó un informe del Módulo de Condiciones Laborales Docentes del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda (MOCLADUNA) donde pone en números la fuerte caída de los salarios a lo largo del último año.
En el documento -que toman como referencia el período noviembre 2023 a octubre 2024 analizan ocho ítems de acuerdo a la evolución de los precios informada desde el INDEC. La conclusión es demoledora.
La medición toma elementos de la canasta básica y en todos hay un fuerte retroceso en la capacidad de compra. Las variables elegida fueron artículos de limpieza, combustible, telefonía celular, transporte, medicamentos, luz, alquiler y productos alimenticios.
En números concretos y repasando por rubro respecto a un año en todos los ítems hay un retroceso en esa capacidad de compra. Medida por lo que podía comprar con un salario y en la actualidad los números son los siguientes: Productos de limpieza (-34%); Combustibles y Lubricantes (-40%); Telefonía y Servicios de Internet (-40%); Transporte Público (-49%); Productos Medicinales y Artefactos para la Salud (-33%); Electricidad, Gas y Otros Combustibles (-41%); Alquiler de la Vivienda (-41%); y Alimentos y Bebidas No Alcohólicas (-18%).
Gastón Freire, docente de la Universidad Nacional de Avellaneda e integrante de MOCLADUNA, manifestó en consulta a Portal Sur. «Por solo mencionar un ítem, en noviembre del año pasado el litro de nafta súper estaba 284 pesos y ahora entre 1170 y 1200 pesos. Llenar un tanque costaba 14 mil pesos, ahora 60 mil».
«Dicen que no hay inflación, pero lo que cayó y no se recupera es el poder adquisitivo del salario. Estamos viviendo un período que es una tragedia para el trabajador».
Vale recordar que a lo largo de todo el año, el Gobierno nacional desfinanció a la universidad pública y que gran parte de la motosierra fue sobre los salarios de docentes y no docentes. Que los gremios del sector vienen denunciando que hay convocatoria a mesas paritarias, pero sin ningún tipo de negociación, autoridades del gobierno solo comunican el número.
Para lo que viene en 2025 el panorama no es a esta altura alentador, al menos en los números iniciales planteados por el Gobierno nacional en la redacción del presupuesto.