Trabajadores del frigorífico Penta de Bernal, Quilmes, fueron reprimidos por la Policía Bonaerense en una protesta que realizaban en la puerta de la empresa. El propietario del frigorífico, Ricardo Bruzzese, impide el paso de los 240 trabajadores desde hace más de dos semanas, adeudando una quincena y desconociendo la Conciliación Obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo de Nación. Gremios de la Carne realizarían un paro de 24 horas el próximo lunes.
Por Leonardo Martín
El motivo que desencadenó la represión fue el intento de los trabajadores de impedir que retirarán mercadería -medias reses -del frigorífico que mantiene sus puertas cerradas por un un lock out patronal desde el 17 de marzo pasado. Allí la Policía Bonaerense arremetió con palazos y disparando balas de goma dejando trabajadores heridos, varios de ellos con varios impactos de balas de goma en el cuerpo. Penta se encuentra a la altura de la Rotonda de Pasco (límite de Bernal con Lanús y Lomas de Zamora).
Juan Córdoba , delegado y Secretario Adjunto del Sindicato de Frigoríficos de la carne denunció: “Todo comenzó porque Bruzzese no quiso reconocer a los tres delegados que fuimos elegidos en diciembre. Extorsionó a los trabajadores que si los delegados no renunciaban cerraba el frigorífico y el 17 de marzo lo cerró . Denunciamos un bloqueo patronal . No pagó la quincena y no deja entrar a los trabajadores, cerró las puertas y puso gente paga para detener que entremos ”.
“No nos pagan, no nos dan una respuesta. Decidimos acampar, nos quedamos en los accesos al frigorífico. Decidimos hacer una medida más fuerte porque no podés volver a casa sin plata”, expresó otro de los trabajadores.
Córdoba indicó en diálogo con Radio Gráfica que de no haber una solución al conflicto y en repudio a la represión, “el próximo lunes los gremios de la carne realizarán un paro de 24 horas.
El Ministerio de Trabajo de Nación dictó la Conciliación Obligatoria el 18 de marzo, pero la empresa no la acató. Según informó el dirigente del gremio de la Carne, Jorge Córdoba, amenazaron a los trabajadores con que si la cartera laboral- que – avanza con una multa por incumplimiento “pide la quiebra y cierra el frigorífico”.
El ministro de Seguridad Sergio Berni se presentó horas después de los hechos para dialogar con los trabajadores. En un video difundido por ANRED dijo que “los policías tenían una orden bien clara. Voy a hacer lo que tengo que hacer como Ministro. Me voy a hacer cargo de los policías que hicieron las cosas mal”.
Horas después de los hechos, el gobernador Axel Kicillof anunció que los responsables de la represión fueron apartados.
“La orden era no reprimir, como en cada conflicto en la provincia de Buenos Aires. Está bajo investigación todo el caso”, indicó.
“También tenemos un problema con el empresario que no respetó una Conciliación Obligatoria que dictó el Gobierno nacional. Hay que actuar fuertemente para que los empresarios la acaten”, completó el Gobernador.
Los trabajadores se reunieron este miércoles con la intendenta del distrito, Mayra Mendoza, donde les prometió “que iba a hablar con el propietario de la empresa para destrabar la situación”. Una vez ocurrida la represión, el Municipio rápidamente difundió un comunicado donde expresó que “de ninguna manera avala la represión sufrida por los trabajadores y repudia la violencia como mecanismo de solución a este conflicto“.
Ricardo Bruzzese es un empresario con un largo recorrido en el mundo de la carne. Es propietario de otros dos frigoríficos, fue uno de los impulsores del programa Carne Para Todos en tiempos donde Guillermo Moreno manejaba la Secretaría de Comercio Interior. Tuvo, además, aspiraciones políticas en La Matanza donde en más de una oportunidad intentó ser candidato a Intendente tallando en la interna del peronismo local. Lo señalan, además, como uno de los operadores de la “mesa de la carne”, con antecedentes de haber operado contra empresas recuperadas del sector frigorífico. Actualmente Bruzzese integra el Consejo Nacional en el marco del Plan Argentina contra el Hambre, que dirige Victoria Tolosa Paz.
En declaraciones a Diario Bae se excusó, “Yo no soy dueño, solo lo gerencio. El problema es que los delegados que ganaron son los que ya tomaron la planta hace cinco años, usan el mismo modus operandis, me pidieron $ 30,000 mensuales para trabajar tranquilo y les dije que no. Luego fueron a pedirle plata al matarife para terminar la faena, hay denuncias en la comisaría y en la fiscalia. Sabiendo esto, nosotros que todos los viernes que no se pagan la quincena le adelantábamos plata, a 7 trabajadores no les dimos por pedir coimas. Ahí comenzó el conflicto”.
