El Defensor del Pueblo de Avellaneda, Daniel García, repudió enérgicamente el cierre de Télam y lo calificó como un hecho que quiere cercenar el derecho a la información, a la comunicación de todo el pueblo argentino, antidemocrático, y comparó el vallado de la agencia con un claro acto de censura, que pone en riesgo genuino la libertad de expresión.
Afirmó García que, queda en claro que, al gobierno, le molesta la impronta federal de la agencia de noticias nacional. Es Télam la agencia que provee, en forma gratuita, a todos los medios, en cualquier parte del país, brindando calidad, pluralidad y veracidad en sus publicaciones.
Resulta mas que claro que el cierre de la agencia nacional de noticias es producto del famoso DNU, mediante el cual el Presidente Milei pretende gobernar con atribuciones que no le competen. Debe recordar la existencia del Congreso Nacional y sus representantes, diputados y senadores que también fueron electos por el pueblo para cuidar los derechos de los ciudadanos. En el caso de Télam, a informarse libre y veraz, se encuentren en el rincón del país que fuere.
Dijo el Defensor del Pueblo de Avellaneda, que se unía al abrazo simbólico convocado por sus trabajadores, quienes fueron cesanteados de la forma más vil y cobarde al no permitírseles el ingreso a su lugar de trabajo. Las autoridades ni siquiera tuvieron la decencia de notificarlos fehacientemente del cierre y, en consecuencia, que pasaban a integrar la larga lista de ciudadanos sin trabajo.
Finalmente, García le pidió al Presidente Milei, que cometa un acto de grandeza y recapacite sobre la medida ordenada, pues de ello depende la defensa de la soberanía informativa de la República Argentina.