Renovación de autoridades en CGT. Las dudas, la reforma del estatuto y la participación femenina

Por Leonardo Martín 

La Confederación General del Trabajo (CGT) realizará este jueves el Congreso Ordinario en Parque Norte para renovar autoridades por los próximos cuatro años. A horas de realizarse el Congreso el principal interrogante pasa por saber como quedará conformada la conducción, si los gremios industriales estarán representados en un eventual triunvirato en la Secretaría General y en el resto del Consejo Directivo. Por otro lado, se reformará el estatuto creando ocho nuevas secretarías y con modificaciones para promover una mayor participación femenina, tema no exento de debates y críticas desde Mujeres Sindicalistas.

La convocatoria es para las 9 de la mañana en Parque Norte, predio del Sindicato de Empleados de Comercio de la Ciudad de Buenos Aires, en una jornada donde se prevé que se realice el Congreso ordinario y, previamente, uno extraordinario en el cual se realizarán las modificaciones del estatuto.

Dentro de las complejidades habituales de cada renovación de autoridades a partir de los posicionamiento de los diversos espacios gremiales que componen la CGT, inicialmente parecía un camino consolidado hacia una unidad, al menos en lo formal, amplia y sin grandes sobresaltos. Inclusive con un regreso de sectores que no participaron de la normalización de 2016 o que pegaron el portazo posteriormente por disidencias durante el gobierno de Mauricio Macri. Sin embargo, en los últimos días han aparecido algunas diferencias en torno la conformación de la Secretaría General.

En principio se repetiría un triunvirato de conducción como se acordó en el año 2016 cuando se normalizó la CGT y confluyeron las tres centrales que coexistían en ese momento. Números puestos son Héctor Daer; un referente del moyanismo que sería Pablo Moyano y queda la incertidumbre por la tercer silla. En principio iba a ser para el dirigente metalúrgico Antonio Caló, pero un grupo de gremios impulsa la permanencia de Carlos Acuña, dirigente encolumnado con el gastronómico Luis Barrionuevo, reaparecido para sostener una cuota de poder en CGT.

La Confederación de Gremios Industriales que nuclea a casi 30 organizaciones reclama ser parte de la Secretaría General e incluso quedó deslizada la amenaza de no integrar el Consejo Directivo de no concretarse esa presencia. Mientras se redacta esta nota (tarde del miércoles) se encontraban reunidos en la sede de SMATA para ajustar el posicionamiento que tendrá el espacio.

En los últimos días también se barajó la posibilidad de agregar una cuarta Secretaría General, un planteo que no tiene consenso. Inclusive dirigentes de relieve descartaron esa posibilidad, sin embargo es prudente siempre esperar hasta último momento para negar esa posibilidad.

 

REFORMA DEL ESTATUTO Y PARTICIPACIÓN FEMENINA

Uno de los objetivos para la renovación de autoridades es lograr una mayor participación femenina que en la actual configuración solo tiene a una sola representante, Noe Ruiz. La Mesa Chica de la CGT promueve ampliar la cantidad de secretarías de las actuales 25 a 33, creando cuatro nuevas y desdoblando otras cuatro. Atento a que cada secretaría es designada a un gremio, la propuesta es que las organizaciones designen a un varón y a una mujer que indistintamente puedan participar de la reuniones del Consejo Directivo. Asimismo, que siempre haya un 30% de representación femenina en esas reuniones.

Desde las Mujeres Sindicalistas de la Corriente Federal reclaman que haya un cumplimiento efectivo de la Ley de Cupo que establece un piso del 30% en la designación de los responsables de las Secretarías. Mañana se verá la resolución final, pero todo indica que se definirá con la duplicación de cargos.

 

UNIDAD SIN PROGRAMA

Uno de los reclamos que realizan sectores de la CGT, entre ellos la Corriente Federal de Trabajadores y el SEMUN (Sindicatos en Marcha para la Unidad Nacional) es la necesidad de que la central cuente con un programa que guíe la acción política. Como una forma que la unidad sea más que un acuerdo de superestructuras, que tenga contenido más allá de los nombres propios.

Dada la falta de debate y el poco tiempo para establecer un programa, dirigentes como Héctor Amichetti y Sergio Sasia, vienen planteando que de no ser un programa al menos se acuerden 5 o 6 puntos «irrenunciables». Se verá el tenor del debate en el Congreso y si finalmente hay un acuerdo en esa dirección y que le de volumen a la consigna Desarrollo, Producción y Trabajo planteada en la marcha donde del pasado 18 de octubre.

 

 

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