«El discurso fue muy emocionante, hasta el punto de haberme quebrado cuando hablaba el Presidente», manifestó el juez de Garantías, actualmente suspendido, Luis Carzoglio.
«Hace un año y una semana que no trabajo. Valió la pena el camino que uno se ha dispuesto a recorrer, uno no está solo. Uno encuentra a un Presidente que es el de todos que habla de imparcialidad e independencia de la Justicia, habla de solidaridad», se mostró efusivo Carzoglio. No es para menos.
El 5 de diciembre de 2018 fue primero apartado de sus funciones como Juez y luego suspendido. Las razones, un pedido de Jury de Enjuiciamiento en base a viejas denuncias que fueron reactivadas tras negarse a firmar una orden de detención de Pablo Moyano acercada por funcionarios de altos cargos jerárquicos de la Agencia Federal de Inteligencia. Esa detención estaba relacionada con la causa del dirigente camionero acusado de malversación de fondo en Independiente. A partir de esa negativa, su vida se convirtió en un calvario.
«Ese discurso, más allá de lo que toca en la Justicia, es un paso fundamental en la reconstrucción del país», celebró. «Tenemos que tener justicia independiente, sino no hay República«, agregó.
Carzoglio, de 69 años expresó que su intención es volver a ejercer como juez. Debe esperar que se conforme nuevamente el Jury de Enjuiciamiento para que evalúe su situación.
Alberto Fernández, en su discurso ante la Asamblea Legislativa, adelantó que una de las prioridades es transformar la AFI. Organismo que presionó a Carzoglio, de allí la especial alegría por esa medida.
«Si hay decisión política y todo un pueblo esclarecido van a tener que aceptarlo», subrayó. «El discurso del Presidente me fortaleció, de atravesar por una situación similiar volvería a hacer lo mismo», concluyó Carzoglio.
