El fotoperiodista oriundo de Remedios de Escalada recibió el alta médica tras permanecer 83 días internado tras se alcanzado por un proyectil de gas lacrimógeno disparado por un gendarme en la movilización del pasado 12 de marzo. Continuará su recuperación en el Hospital de Rehabilitación Manuel Rocca.
La imagen emociona. Un Pablo Grillo sonriente saliendo del Hospital Ramos Mejía donde luchó por su vida durante semanas tras recibir el impacto de una cápsula de gas lacrimógeno en la violenta represión del 12 de marzo. Su vida pendió de un hilo y con dudas por las secuelas con las que podría quedar tras el impacto.
Ahora continuará la recuperación en el Hospital de Rehabilitación Manuel Rocca ubicado en Segurola 1949, Ciudad de Buenos Aires.
“¡Gracias eternas por el cariño, el apoyo y acompañamiento!”, fue el mensaje de la familia posteado en las redes sociales Justicia por Pablo Grillo.
En estos casi tres meses, Pablo pasó por operaciones quirúrgicas, de extrema gravedad en un comienzo. Un tiempo donde recibió múltiples muestras de afecto y solidaridad.
