Se realizó un homenaje a cinco jóvenes católicos detenidos desaparecidos durante la Dictadura Cívico Militar que eran parte de la parroquia Nuestra Señora de la Asunción. Fue en un acto en la Plaza Lolita Torres donde hay colocadas baldosas de la memoria recordándolos.
Plaza Lolita Torres en Avellaneda. Un acto para recordar y reivindicar a cinco jóvenes que la Dictadura Cívico Militar secuestró y desapareció entre junio y julio de 1977. Sus nombres: Roque Álvarez Aversa, Ricardo Arrighi, Roberto Jorge Berrozpe, Nora Delgado y Dante Merolla. Todos coincidían en la fe y militancia política, el compromiso con los trabajadores y los pobres, desde el cristianismo en la parroquia Nuestra Señora de la Asunción.
En un acto que el sábado pasado con familiares y amigos de esos cinco jóvenes. Dentro de las intervenciones, una de ellas fue la del Padre Juan Rega, delegado de la Diócesis de Avellaneda y Lanús, con palabras sentidas:
«Puedo ser bueno o vos podés ser bueno, Pero no alcanza con eso. Es necesario vivir organizados. Al mal organizado responderle con el bien organizado, en la Comunidad».
«Y eso ? En esta historia con placas y baldosas, la comunidad organizada, junta, rinde cuenta de su propia historia», agregó.
«La Comunidad Organizada es la que es capaz de dar respuesta al mal que acontece. Hoy nos encontrarnos y queremos ser una respuesta, como cristianos, una respuesta para los que están sufriendo, para los que se caen del sistema. Queremos ser una respuesta comunitaria, pues nadie se salva solo o sola», enfatizó.
«La salvación es un proyecto. Hacer memoria de estos compañeros, Dante, Nora, Roberto, Ricardo, Roque es también un recordatorio de que los pueblos que no se rinden cuentan su historia. Son capaces de proyectarse».
«No rendirnos, dar cuentas de nuestra propia historia, nos invita a presentarnos un futuro de comunidad, de comunidad organizada, capaz de responderle al mal del individualismo, de la exclusión del hambre, de las políticas que vienen a romper el orden de nuestra vida. Por eso quiero, como hombre creyente, como hombre de fe pedirle a Dios que bendiga este lugar, que bendiga estas placas, que los bendiga a ustedes, fuerza, para quien lucha, sí, pero para hacer comunidad. Hacer comunidad, es una tarea compleja, una tarea difícil, pues hace falta. descalzarse, hace falta abrir el corazón de uno mismo para permitir que la otredad, el otro ingrese para poder ser comunidad, la Comunidad organizada», concluyó.
En el acto, previamente había hablado Rubén Cavalletti, que organizó el encuentro junto a Luis Berrozpe, Isabel Alvarez y Alberto Merolla.
Antes, Eduardo Berrozpe hizo un breve recuerdo sobre la vinculación de los compañeros recordados con la historia de la pastoral social en Avellaneda. Estuvieron presentes junto a familiares, amigos y compañeros – entre los que destacó Héctor Díaz -, el dirigente sindical y referente de la Cultura Hugo Caruso; Claudio Yacoy , Secretario de Derechos Humanos; y Carlos Lombardo, Secretario de Producción, integrantes de la gestión del Intendente Jorge Ferraresi, Tupac Gómez, Secretario General de la CTA, Diego José de la Asociación Bancaria.
