El Seleccionado argentino venció 1 a 0 a Brasil en el Maracaná con un gol de Nicolás Otamendi de cabeza. Fue la primera derrota en eliminatoras de la verdeamarelha en condición de local.
Un partido duro y trabajo en lo futbolístico, tambiéncon incidentes previos con los hinchas argentinos que demoraron el comienzo del encuentro. Otra vez la represión habitual de la policía brasileña.
Argentina no tuvo su mejor versión, pero ganó. No logró manejar la pelota ni sostener esa presión asfixiante que la caracteriza. Fue un partido muy entrecortado, con faltas permanentemente y pocas ocasiones de gol. Mayormente fueron para Brasil.
El gol para el seleccionado de Lionel Scaloni llegó a los 18´del complemento con un notable salto y frentazo de Nicolás Otamendi tras un tiro de esquina.
Brasil, que con este encuentro acumuló tres derrotas seguidas, no tuvo argumentos ni ideas para generar peligro más allá de algunas buenas intervenciones del Dibu Martínez.
Para peor, sufrió la expulsión de Joelinton no del todo justa a los 36´de la segunda etapa. De allí en más, prácticamente no inquietó.
Con esta victoria, el Seleccionado argentino cierra un año brillante. Tras el cierre con la obtención de la Copa del Mundo en Qatar lidera en soledad las eliminatorias y solo perdió días atrás con Uruguay.
Es cierto que la curva del rendimiento disminuyó en los últimos dos partidos, pero aún así se dio el gusto de vencer a un golpeado Brasil y sacarle el invicto por eliminatorias en condición de local.
La noticia que conmovió en el final de la noche fueron las declaraciones de Lionel Scaloni en conferencia de prensa donde expresó que aún no está cerrada su continuidad para lo que viene. Extraño.
Se viene un fin de año donde el Chiqui Tapia deberá trabajar para darle la continuidad a un ciclo histórico para el fútbol argentino.
