El Granate venció 3 a 0 al Viaducto en la Fortaleza con más contundencia en el resultado que en el desarrollo del juego y con una serie de fallos muy discutibles que favorecieron al conjunto local. Convirtieron para el Granate Diego Braghieri, Leandro Díaz y Pepe Sand, los últimos dos de penal.
Lanús volvió al triunfo tras cinco fechas con resultados esquivos, Arsenal volvió a perder y mira el descenso cada vez con más preocupación. El resultado no refleja lo que sucedió en el campo de juego, pero al final de cuentas en el fútbol los números son inapelables. Como variable del juego hubo, una vez más, un arbitraje pésimo de Germán Delfino que en Arsenal a esta altura y desde hace rato piensan que no es casualidad. Que más allá de las carencias hay un empujón de los arbitrajes para arrojarlo a la B Nacional.
El partido comenzó favorable para el equipo de Frank Kudelka que a los 5`convirtió con un frentazo de Diego Braghieri, previamente Delfino había sancionado una falta dudosa.
Arsenal lo fue a buscar y tuvo mayormente el dominio del juego, pero sin la profundidad. Las más claras las tuvo Facundo Pons en una doble jugada que no terminó de concretar.
Sobre el final de la primera etapa, otra vez Delfino tuvo un protagonismo excluyente. Sancionó un penal de Thiago Banega a Toto Belmonte cuando apenas lo había rozado. Leandro Díaz lo cambió por gol. 2 a 0.
El segundo tiempo transcurrió entre un Lanús tranquilo por la ventaja y un Arsenal con pocos elementos para descontar. Sobre el final fue el momento para cerrar una gran noche de resurrección para el Granate. Tras un vía crucis de más de seis meses sin convertir Pepe Sand puso cifras definitivas de penal. 3 a 0, Lanús con alivio, Arsenal con un destino al que no puede torcer y los fallos arbitrajes lo empujan cada vez más.