Llegan 330.000 dosis de la Sputnik V, ¿qué se espera para las próximas semanas?

En medio del temor por una segunda ola y por la crítica situación sanitaria que atraviesan los países vecinos, llegarán en la tarde del viernes 330.000 nuevas dosis de la Sputnik V. ¿Qué otras dosis se esperan para las próximas semanas?

El vuelo de Aerolíneas Argentinas arribará a Ezeiza en la tarde del viernes. Finalmente son 330.000 dosis de la Sputnik V, una cifra baja pero que permite continuar con la vacunación la próxima semana.

La cadena nacional presidencial del jueves por la noche blanqueó una situación: Existe una fuerte preocupación por el crecimiento de los contagios a nivel local, por la situación explosiva que viven los países vecinos y porque las vacunas no están llegando en los tiempos previstos de modo de tener vacunada a las personas que corren mayores riesgos.

Para las próximas semanas el Gobierno prevé que va a tener una mayor cantidad de dosis disponibles, pero lo cierto es que nadie se anima a afirmarlo frente al cuello de botella global en la entrega de vacunas por parte de los grandes laboratorios que la producen.

En principio, para la última semana de marzo comenzarían a llegar las 3 millones de dosis acordadas con el laboratorio chino Sinopharm. Se verá la velocidad de la entrega, pero sí hay una fecha tentativa de comienzo de entrega que es el 23 de marzo.

Con el comienzo de abril también tendrían que comenzar a llegar lotes de la vacuna de Astrazeneca, producida en Argentina, pero que se está fraccionando en México. El faltante de algunos insumos estaba demorando esa tarea en México.

También debería seguir ingresando más vacunas de la Sputnik V de la cual el gobierno argentino acordó 22 millones de dosis, pero que viene con una entrega demorada.

En ese contexto, se prevé que abril va a ser un mes de vacunación de mayor intensidad. Un debate que ha reflotado en los últimos días es si priorizar vacunar con una primera dosis a una mayor cantidad de personas o acelerar que sean con las dos necesarias para las vacunas que ingresan al país. El argumento principal es que ya con una dosis se consigue una inmunidad entre el 60 y 70% lo que permitiría bajar contagios y la gravedad de los mismos.

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