En La Plata, la Academia hizo tablas con el Pincha en el encuentro de ida de los octavos de final de la Copa de la Superliga.
Era difícil que en el estreno de la Copa Superliga se viera la mejor versión de Racing. Después de haber sido campeón hace poco menos de un mes, la falta de actividad era el primer rival en La Plata. Claro, también tener un equipo lleno de pibes enfrente que corren y meten desde el principio hasta el final. Sin embargo, la Academia mostró su mejor imagen en el comienzo. Con Pol Fernández y Zaracho como ejes, intentó dominar a Estudiantes, que respetó bastante al campeón.
Con jerarquía y autoridad Racing se metió rápido en partido. Pero, lógico, la ausencia de Lisandro López se sintió. Ese jugador diferente que no sólo no falla en la red sino que también maneja los tiempos del encuentro. Quizáz eso le faltó al equipo de Coudet. Después de un mano a mano que desperdició Solari, Cristaldo acertó de cabeza tras un jugadón de Cvitanich. Y ahí se vieron flashes del equipo que dio la vuelta hace poco.
Cambio de ritmo, mucha gente en campeo rival y abriendo la cancha para atacar por los costados. De hecho, en el arranque del ST podría haber aumentado la diferencia, pero no estuvieron finos en los últimos mestros. Desde ahí creció Estudiantes, que por una jugada aislada, acompañada de un grosero error conceptual de Saravia y Solari a la hora de cerrar, llegó al empate. Ahí se terminó el partido para Racing. Prácticamente no atacó más y entendió que el 1-1 le servia.
En estos mano a mano, donde todavía quedan 90 minutas, la Academia se Pinchó en el final y hasta casi lo pierde. Pero apareció Arias para demostrar por qué es el arquero del campeón y sellar un resultado que deja bien parado a Racing.
LOS GOLES DE ESTUDIANTES-RACING:
