Los números difundidos por el INDEC confirmaron lo que se siente en la calle, en los comercios y en las industrias. En octubre cayó la actividad económica un 4% acumulando 7 meses consecutivos a la baja. En lo que va del año la economía acumula una retracción del 1,4%.
En el detalle realizado por el informe el sector que más sintió el impacto de la caída en octubre fue el de Comercio mayorista, minorista y reparaciones con un 11,2%. Cifra previsible de acuerdo a la caída del poder adquisitivo del salario. Septiembre y octubre fueron meses con niveles muy altos de inflación que impactaron en la capacidad de compra del salario.
En cuanto a otros rubros que terminaron con números negativos están la Industria Manufacturera (-5,3%), Construcción (-4,7%), Transporte y Comunicaciones (-3,3%), Hoteles y Restaurantes (-3,4%).
Dentro de los pocos rubros que mostraron números positivos están la pesca (+28,4%), Agricultura, ganadería, caza y silvicultura (+2,9%).
Las razones de la caída son evidentes, el impacto de la devaluación del peso recortando el poder de compra de los salarios, la baja de la inversión (11,1% en el tercer trimestre según el INDEC), las altas tasas de interés (entre 60 y 70%) y el ajuste encarado por el Gobierno a partir del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
En la visión más optimista de los economistas afines al Gobierno es que a partir de marzo comience a mejorar lentamente la economía. El Fondo Monetario Internacional ve ese crecimiento posible a partir de la segunda mitad del próximo año.
Por el contrario, una variedad de economistas tanto heredoxos como ortodoxos no avizoran ese crecimiento. Tampoco organizaciones que nuclean a pymes ni dirigentes de la propia Unión Industrial Argentina.
